Descripción

Haití obtuvo un puntaje de 0,73, ubicándose en el puesto 45 entre las 55 naciones relevadas por el Climascopio 2014. Entre los 26 países de América Latina y el Caribe, se situó en el vigésimo lugar.

El 77% de la capacidad instalada del país, de 295MW, es aportado por plantas que utilizan petróleo importado. Las empresas locales de servicios eléctricos afrontan numerosos desafíos, incluyendo el suministro intermitente debido a la inadecuada infraestructura y a la falta de un marco regulador que implemente y haga cumplir reglas y estándares de calidad.

Sólo el 28 por ciento de sus 10,3 millones de habitantes tiene acceso a la red, lo que lo pone al final de la tasa de electrificación de América Latina. Como resultado, la mayoría de los haitianos deben utilizar combustibles fósiles como el kerosene y el diésel para alimentar sistemas eléctricos distribuidos. El 72% de la población utiliza el carbón de leña para cocinar. Si bien el país posee un considerable potencial para el desarrollo de energías limpias, cuenta en la actualidad con una sola planta hidroeléctrica (de 54MW) que responde por aproximadamente el 19% de su capacidad de generación, a la que se suman otras pequeñas centrales hidroeléctricas que aportan 7MW.

Desde el terremoto de 2010, la mayor parte de la actividad relacionada con energías limpias en Haití fue auspiciada por organismos multilaterales y organizaciones sin fines de lucro que se propusieron restablecer el sector eléctrico del país. Esto se refleja en su significativo progreso en iniciativas solares no conectadas a la red. En 2014, Haití fue incluido en la metodología “fuera de red” (“off-grid”) del Climascopio, que tiene en cuenta su cadena de valor fuera de la red y que otorga mayores puntajes a los indicadores relacionados con proyectos de esa naturaleza.