Descripción

La República Dominicana alcanzó una puntuación de 1,16 y finalizó vigesimocuarta entre las 55 naciones evaluadas por el Climascopio 2014, en tanto que se ubicó décima entre los 26 países de América Latina y el Caribe.

El país tuvo un buen desempeño en el Parámetro I, Marco Propicio, merced a su gama de políticas e incentivos en favor de las energías renovables. Pero no le fue tan bien en el Parámetro II, Inversión en Energías Limpias, ni en el Parámetro III, Cadenas de Valor de Energías Limpias, dado el bajo nivel de inversiones en energías renovables en 2013 y su reducida red de proveedores de servicios para las energías limpias.

La red eléctrica de esta nación insular es una mezcla de distintas fuentes: el 91% del total de 3GW es aportado por gas natural (690MW), plantas hidroeléctricas (380MW), carbón (314MW), y petróleo y diésel (1,7GW). Las energías limpias representan el restante 9%, con 85MW de eólica y 223MW aportado por pequeñas centrales hidroeléctricas.

El gobierno se ha fijado la ambiciosa meta de obtener el 10% de la generación a partir de fuentes renovables para 2015 y de alcanzar el 25% en 2020. También se fijó el objetivo de reducir las emisiones de GEI en un 50% por debajo de los niveles de 2010 en 2050. Mirando al futuro, serán necesarios esfuerzos adicionales para lograr las ambiciosas metas que se ha propuesto el país.